El Gobierno de México enfrentará meses complejos en su relación con la Administración del Presidente Donald Trump, ante las tensiones políticas que enfrenta el Mandatario de Estados Unidos por la cancelación del alivio a cerca de 800 mil indocumentados conocido como la Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA).
Ahora, el Congreso tiene seis meses para reemplazar el programa, que beneficia a cerca de 620 mil jóvenes de origen mexicano, a la par de la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) de América del Norte, el cual el republicano aún amenaza con cancelar. Ante ésto los expertos recomiendan una cosa: paciencia.
"La estrategia en este momento debe ser comprar tiempo para que se pueda mejorar el ambiente dentro de la Casa Blanca", dijo a REFORMA Marco López, presidente de la firma de consultoría bilateral Intermestic Partners y ex funcionario del Departamento de Seguridad Interna.
Ya que el Presidente busca concluir a toda costa este 2017 con victorias legislativas de peso, advierten expertos, ésto podría afectar la retórica ante México como comercio y migración, aunque las negociaciones del TLC podrían salir bien libradas, confían.
Por su parte, Tony Payán, experto de la Universidad de Rice en Houston, asegura que el Gobierno de Enrique Peña Nieto ubica al TLC como la prioridad a sacar adelante.