De las 504 carpetas de investigación del presente año, 174 corresponden específicamente a denuncias por violaciones, mientras que 330 son por otros delitos, como abuso sexual, pederastia y hostigamiento, lo que significa que diariamente se están cometiendo 1.38 delitos de esta naturaleza.
En contraste, durante el 2016 los números eran relativamente bajos, durante el mismo periodo de los seis meses, el número de denuncias atendidas fue de 278 de las cuales 106 víctimas fueron mancilladas y 172 fueron clasificadas por denuncias de otros delitos sexuales, es decir que la incidencia se disparó en un 44.8 por ciento.
Más denuncias
Si separamos los delitos, en el caso específico de las violaciones éstas tienen un repunte del cinco por ciento en el último año, mientras que el grupo de los otros delitos sexuales concentra un alza del 13 por ciento.
Los anteriores datos corresponden únicamente a los casos que se denuncian en las agencias del Ministerio Público. De acuerdo con estimaciones del INEGI, cerca del 95 por ciento de los delitos sexuales ni siquiera se denuncian, sino que se quedan en la llamada "cifra negra".
Durante el 2017, los meses que registraron el mayor número de víctimas por delitos sexuales, fue Junio con un total de 100 denuncias de los cuales 30 de las víctimas fueron violadas, seguido por Mayo con 98, enero con 86 y Abril con 82 personas que fueron víctimas de un delito sexual.
Por municipios
En este mismo sentido, el municipio del Centro dado su densa población, se ubica en el primer lugar en cuanto a las denuncias realizadas ante la Fiscalía General del Estado, pues durante el primer semestre se apuntó 216 casos, seguido por Cárdenas con 46 y Comalcalco en tercer lugar con 30 quejas ante las instancias estatales.
Cabe mencionar que en el caso del Centro, 80 personas fueron víctimas de violación, mientras que 136 en los ministerios públicos fueron clasificadas con el rublo de otros delitos sexuales.
Los municipios con menores casos fueron E. Zapata y Jonuta con solo 3 casos denunciados, seguidos por Tacotalpa con 5, Jalapa con 6 y por último Balancán con 7 las víctimas registradas.
Este tipo de conductas está tipificado en el Código Penal de Tabasco, dentro del rubro en contra de la libertad y la seguridad sexual y el normal desarrollo psicosexual, el que mayor penalidad alcanza es la violación.
Los artículos 148, 149, 150, 151 y 152 indican que existe diversas variantes en el concepto para cometer este ilícito, y la pena es de 8 a 14 años de cárcel y se eleva hasta 20 años cuando la violación sea cometida por dos o más personas.
La misma gravedad, es para las personas que cometen "pederastia", tipificado en nuestra legislación en el artículo 327, reza textualmente: "comete el delito de pederastia, a quien con consentimiento o no de la víctima tenga relación con ella, siendo menor de catorce años. Este delito se castigará con pena de quince a veinte años de prisión".
En tanto para otros delitos como el abuso sexual el castigo es de uno a cuatro años de prisión.
'Me tapó la boca, me amenazó y abusó de mí'
"Fue como si me arrancaran la vida, porque tenía muchas ilusiones de celebrar mis XV años e invitar a mis amigas y amigos de la escuela, pero todo se truncó", relató con voz pausada la mujer que hoy cuenta con 31 años de edad.
La mujer de tez morena, contó que a raíz de los hechos demandó ante la entonces Procuraduría General de Justicia, pero su denuncia se fue quedando en el "limbo", debido a que el agresor se marchó, era de Juárez, Chiapas, o de Tila, "no supimos de él jamás".
Los hechos
enía 14 años de edad en ese entonces y el violador como 20, era un maleante que se dedicaba a robar, no nos metíamos con él porque rentaba un cuarto cerca de donde vivíamos", relató.
Para Yolanda lo ocurrido fue una amarga experiencia porque "entró a mi casa donde estaba en mi recámara, me tapó la boca, me amenazó con un arma de fuego con matarme y me obligó a tener relación por vez primera", dijo.
La víctima de 31 años de edad, logró superar el trauma que le causó la violación y tuvo que ir con especialistas para poder salir adelante. "No fue fácil, en verdad me sentí como una basura, odiaba a los hombres porque sentía que todos eran iguales", reveló.
Al paso del tiempo fue superando todo, "acudí con psicólogos para salir adelante", fue así que hoy estoy liberada, me costó trabajo para enamorarme, ahora lo estoy con el padre de una hija que tengo y vivo feliz en Tenosique.
(Con información de Josué Pérez Hernández).