Pese a que el implicado en actos criminales reconoce la relación de amistad y negocios que tenía con el futbolista y el cantante respectivamente, señaló puntualmente a los agentes de la DEA que lo visitaron en el reclusorio SUR, que ellos ignoraban sus actividades ilícitas.
Durante los encuentros el capo nunca identificó a ninguno de los hoy implicados como prestanombres de su red de narcotráfico.
Flores Hernandez incluso les aclaró que Julión en particular se mantenia en contacto con el a través de sus contadores, mismos que también desconocian que su socio era narcotraficante.
Las autoridades mexicanas solicitaron el traslado de Flores a un penal federal debido a su peligrosidad, luego de que el departamento del Tesoro de EU lo señalara como el líder de una red de lavado de dinero.
Este departamento estadounidense señaló que "El Tio", actuaba de forma independiente, y sus movimientos los hacía mediante alianzas estratégicas con el Cartel de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación.
Con información de http://www.milenio.com/