La destituida fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, denunció hoy un golpe contra la Constitución, del que acusó al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y al presidente Nicolás Maduro, luego que la Asamblea Nacional Constituyente aprobara su destitución y le prohibiera salir del país.
“Hoy denuncio que el TSJ y la ilegal Asamblea Constituyente presidencial han pasado por encima de la Constitución y las leyes, decidieron removerme del cargo de fiscal general para que no siga defendiendo los derechos del pueblo”, dijo en una declaración que publicó en la cuenta de Twitter del Ministerio Púbico.
La Asamblea Constituyente aprobó la destitución de Ortega y de inmediato juramentó en el cargo a Tarek William Saab, hasta hoy defensor del Pueblo. La fiscal, quien se ha distanciado en los últimos meses del oficialismo al cuestionar la Constituyente y la legalidad de la elección de los magistrados del TSJ, señaló que el único nombre del proceso que vive el país y que debe alarmar a la comunidad internacional es un “golpe a la Constitución”.
“Lo he dicho y lo reafirmo, desconozco las decisiones de este grupo de magistrados ilegítimos del TSJ y no las asumo, porque están al margen de la Constitución y la ley”, señaló.
Agregó que el Ministerio Público seguirá fiel a la Constitución vigente y “bajo esa premisa nos vamos a mantener hasta el final”. Alertó que “acabar” con la autonomía del Ministerio Público afectará a las víctimas de violaciones de derechos humanos.
Dijo al Ejecutivo que es el principal responsable de “este golpe contra la institucionalidad del Estado, y como tal asumirá ante la historia las consecuencias de esta destrucción de la democracia venezolana”.
“No me rindo, Venezuela no se rinde ni se rendirá a la barbarie, la ilegalidad, el hambre, la oscuridad y la muerte. Nuestro pueblo tiene que mantener viva la esperanza y la unidad. Seguiré luchando por los venezolanos, por sus libertades y derechos hasta mi último aliento y desde el lugar que me toque ocupar”, señaló.
Con información de 20 Minutos