La venta de automóviles nuevos se mantiene en caída permanente.
Cifras de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automóviles (AMDA), indican que en el primer semestre del año la comercialización de autos en Tabasco cayó 12.8 por ciento respecto al mismo período del 2016.
Los datos señalan que de enero a junio del año pasado se vendieron 10 mil 655 vehículos nuevos en las 17 concesionarias que se ubican en el estado, mil 363 más de los 9 mil 292 unidades de este año.
Por mes, durante junio, la caída fue de 18.9 por ciento, al pasar de mil 961 en 2016 a mil 590 en este 2017.
Entrevistados al respecto, representantes de ventas de agencias señalaron que la crisis del petróleo les sigue pegando.
"Llevamos un año batallando con la ventas; aún en el 2015 gente de compañías petroleras apartaba sus autos en diciembre con sus buenos aguinaldos, pero eso se acabó y desde el 2016 estamos en crisis", señaló José Luis Durán, de la agencia Volkswagen.
Especialistas señalan que la baja actividad económica en el sureste, ligada a la crisis de la industria petrolera, ha sido factor para que las ventas de autos estén desaceleradas.
En su momento, el director general adjunto de AMDA, Guillermo Rosales, destacó que en contraste con todo el país, donde la comercialización de vehículos nuevos sigue creciendo, en el sur-sureste presenta datos negativos por la situación económica que viven.
Estados petroleros golpeados
La mala suerte que vive Tabasco en la venta de autos también se refleja en los otros estados petroleros como Campeche, Chiapas y Veracruz, a los que se sumó Yucatán, que no depende del sector de los hidrocarburos, pero también fue golpeado.
Veracruz fue el estado que peor le fue, debido a que tiene más centros de población afectados por el petróleo, como Coatzacoalcos, Minatitlán, Poza Rica y el propio puerto. Ahí las ventas se derrumbaron 18.7 por ciento, las más altas del país.