El Senado votó este martes por estrecho margen iniciar un debate sobre un proyecto de ley para derogar las principales disposiciones de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, pero horas más tarde, los líderes republicanos sufrieron un revés cuando su plan más completo para reemplazar a la ley sanitaria del presidente Barack Obama Votos careció de los necesarios.
La cuenta del martes por la noche necesitaba llegar a 60 votos para superar una objeción parlamentaria. En cambio, cayó 43-57.
Otras se habían combinado con el plan más amplio del Partido Republicano para reemplazar a Obamacare, un proyecto de ley que se está desarrollando en el Senado durante dos meses, pero que fue puesto a un lado la semana pasada cuando quedó claro que no habría 50 votos. Nueve republicanos conservadores y moderados se unieron a todos los demócratas en una votación de 43-57 que efectivamente mató la medida el martes por la noche.
Los republicanos que votaron para rechazar el plan de derogación y reemplazo de su partido fueron Collins Murkowski, senadores Rand Paul de Kentucky, Bob Corker de Tennessee, Lindsey Graham de Carolina del Sur, Dean Heller de Nevada, Jerry Moran de Kansas, Tom Cotton de Arkansas y Mike Lee de Utah.
Para los republicanos, el fracaso terminó el día con una nota agria, horas después de una escena más triunfante en el Senado. Los legisladores de ambos partidos se pusieron de pie en la tarde y aplaudieron cuando el senador John McCain, republicano de Arizona, apareció en la sala a pesar de su diagnóstico de cáncer cerebral. Él emitió un voto crucial a favor de abrir el debate libre y duro sobre el futuro de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio.
La votación de 51-50 para iniciar el debate, con el vicepresidente Mike Pence rompiendo un empate, se produjo sólo una semana después de que el esfuerzo republicano para desmantelar un pilar del legado del ex presidente Barack Obama apareciera casi condenado. Proporcionó una victoria inicial para el Presidente Trump, quien empujó, insultó y amenazó a los senadores en los últimos días para al menos comenzar a debatir la derogación de la ley de salud.
El Senado ahora está avanzando con el debate, las enmiendas y, en última instancia, una votación final en los próximos días sobre la legislación que tendría un efecto profundo en el sistema de salud estadounidense – aproximadamente una sexta parte de la economía de los Estados Unidos.
Pero es completamente posible que al final de la semana, no haya pasado nada.
Tras el nuevo revés con las modificaciones que propuso y que el Senado desechó, ahora Trump pide hacer un plan de salud desde cero.
Con información de La Silla Rota