Tras un fallecimiento en un accidente, tres personas reciben la misma llamada que les dará la oportunidad de obtener el ansiado trasplante de riñón que han esperado desde hace algunos años. Los tres candidatos son Ana (Martha Higareda), una joven de clase alta; Valentina (Tiaré Scanda), una mujer humilde; y "El Chayo" (Rafael Inclán), un predicador.

Las pruebas de compatibilidad determinan que el paciente más óptimo para el trasplante es el hombre, pero gracias a ese encuentro se crean fuertes lazos entre las mujeres que harán cualquier cosa por conseguir un riñón.

Ese es el argumento de la cinta Vive por Mí, del director Chema de la Peña. "El thriller es un género que me apasiona y uní eso a una historia personal que le sucedió a un amigo que necesitaba un trasplante, todo lo que viví y sentí  lo desvié en este guión", dijo el cineasta.

Después de sus recientes trabajos de comedia en la pantalla grande (Cásese Quien Pueda, No Manches Frida y 3 Idiotas), este filme le permitió a Higareda explotar su lado dramático.

"Siempre me ha apasionado desde que empecé a actuar; hice comedia porque me parecía un reto grande y no me sentía muy cómoda haciendo comedia como me siento haciendo drama. Tenía mucha emoción de la película, no sólo porque es un drama y como actriz me abre un abanico de posibilidades, sino porque era una historia que tenía la necesidad de contar, porque habla de cómo las personas se unen a través del dolor", compartió la actriz.

Buscan crear conciencia

Tanto para el director como para los actores, además de entretener, el filme tiene le misión de generar una conciencia sobre la importancia de la donación de órganos. "El dolor y la muerte nos recuerdan que todos somos iguales, parece que hay gente a la que se le olvida, pero en realidad somos iguales, la enfermedad no distingue, y no sufren más o menos los que tienen más dinero", señaló Tiare Scanda. (Reforma)

Con información de Reforma