A diferencia de las dos últimas licitaciones petroleras, en las rondas 2.2 y 2.3, que realizarán mañana miércoles, se esperan ofertas más selectivas de los participantes.
Sobre la mesa estarán un total de 24 campos terrestres con un mayor enfoque al gas, divididos en dos licitaciones y localizados en Tamaulipas, Veracruz, Tabasco y Chiapas.
Ramsés Pech, socio de la consultoría Caraiva y Asociados, dijo que los condensados son uno de los puntos atractivos de algunos campos en ambas licitaciones, además de contar con infraestructura de ductos. Aunque las estimaciones de la Secretaría de Energía marcan que se colocarán alrededor de seis campos entre ambas licitaciones, un aproximado del 30 por ciento que se traduciría en inversiones de entre mil y mil 200 millones de dólares.
Pablo Medina, analista en temas energéticos de Wood Mackenzie, anticipó que el nivel de interés será más mesurado y con ello el resultado de adjudicaciones serán más bajo a lo que se ha visto en licitaciones de aguas profundas y aguas someras, que superaron el 50 por ciento de adjudicación.
Además añadió que ambas licitaciones tienen retos particulares, como la inseguridad en el norte del País y temas de acceso de vía en el sur.
Para la licitación 2.2 están inscritos 9 licitantes, conformados por 11 empresas, y en la 2.3 son 19 licitantes, que suman un total de 28 compañías.
En la lista de petroleras precalificadas están compañías como la colombiana Ecopetrol y las nacionales PetroBal y Carso Oil and Gas.
