Este nuevo programa maligno de chantaje o secuestro ("ramsomware", de ramsom: rescate), que bloquea los ordenadores hasta el pago de 300 dólares en moneda virtual, refleja la vulnerabilidad de numerosas organizaciones, según los analistas.
Los ataques de mayo y de esta semana "subrayan la importancia de reforzar nuestras ciberdefensas, y es lo estamos haciendo" afirmó este miércoles el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
En total más de 2.000 usuarios se han visto afectados, inicialmente en Ucrania y Rusia, según Kaspersky Labs. Este especialista de la seguridad informática basado en Rusia había estimado que este programa de secuestro no era una nueva versión del virus Petya, que ya operó el año pasado, a diferencia de lo que opinan otros especialistas.