El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) señaló que en 2014, el 53.2% de la población tenía ingresos por debajo de la línea de bienestar, y un ingreso mensual per cápita de 3 mil 15 pesos. En 1992, cuando se comenzó a medir la pobreza en México, era el 53.1% de la población, con un ingreso promedio de 3 mil 322 pesos.
“El ingreso real entre 1992 y 2014 es prácticamente el mismo, aunque ha tenido periodos de reducción como en 1995, 2009 y 2014. Por lo tanto dentro de la medición de pobreza, el ingreso de las familias ha sido el elemento que más ha influido en que la pobreza no se reduzca en el largo plazo o que haya bajado en ciertos periodos”, explicó el Consejo en el marco del Día Internacional de la Erradicación de la
Pobreza.
Según el informe Retrato de un País Desfigurado, del Instituto de Estudios para la Transición Democrática (IETD), en 2014, el 64% de los mexicanos con ingresos recibieron uno o dos salarios mínimos al mes. Solamente el 7% de la población obtuvo más de seis salarios mensuales.
“Si se explora la situación de los que ganan un salario mínimo, el 58% están en pobreza y el 12% en pobreza extrema. Si tomamos a los que perciben dos salarios mínimos, el 42.3% está en pobreza moderada y 4% en pobreza extrema”, alertó el documento.
Así, habría 10 millones de mexicanos que, pese a que trabajan, reciben menos de 140 pesos diarios. Aunque el salario mínimo actual se homologó a los 70.10 pesos, la canasta básica alimentaria es de 917.5 pesos.
Las cifras de Coneval indican que existen 11 millones 442 mil mexicanos en pobreza extrema, es decir, que no pueden comprar la canasta básica y que sufren al menos tres carencias sociales. Además hay 24 millones 637 mil pobres por ingresos, quienes no cuentan con el dinero para comprar la canasta básica. La cifra es 4% más alta que la que se obtuvo en 2008.
“Los datos tienen implicaciones mayores para el orden de prioridades nacionales, para la orientación del gasto público y, sobre todo, el social; para instaurar por fin una política de recuperación de los salarios”, consideró el IETD.
Organizaciones sociales, unidas bajo la Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, hicieron un llamado al Gobierno de Enrique Peña Nieto para eliminar los programas sin resultados y subsidios regresivos.
