Las lluvias torrenciales de 210 milímetros que registró la capital tabasqueña el día de ayer, causaron anegaciones en 18 colonias del municipio de Centro y provocaron daños severos, tanto en negocios como en infraestructura.
De acuerdo con el reporte de Protección Civil de Tabasco, en las 18 colonias se contabilizaron un total de 2 mil familias con anegaciones de hasta un metro de profundidad en sus viviendas, y gran parte tuvo pérdidas de sus enseres y electrodomésticos.
La depresión tropical 2E trajo precipitaciones de 210 milímetros, y en una sola hora se registró el 76%, es decir, 160 milímetros.
"Es necesario estar atentos ante las posibles lluvias intensas venideras", expresó Jorge Adalberto Méndez Landero.
La Secretaría de Educación informó que se registraron afectaciones en 12 edificios escolares de Villahermosa, en donde cursan estudios 4 mil 124 alumnas y alumnos; sin embargo, no ameritó suspensión de clases, y sólo en las escuelas con afectaciones, los Consejos Escolares de Participación Social, conjuntamente con directores, determinarán la viabilidad de suspender actividades.
En cuanto a la afectación en los comercios, fueron más de 300 afectados; sin embargo, el daño mayor se registró en Atasta, principalmente en los siete locales de la Plaza Luna. En la plaza los empresarios reportaron haber tenido pérdidas desde los 30 mil a los 2 millones de pesos.
"La presión del agua subió un metro setenta y cinco en esta zona, cosa que no había pasado, probablemente el entubamiento de un arroyo haya tenido que ver. Es una zona alta, ni en el 2007 nos inundamos", dijo César Hernández, empresario.
En el Parque Tomás Garrido se abrió un albergue para atención de las familias afectadas. En Nacajuca sólo se reportaron anegaciones en el fraccionamiento Brisas del Carrizal y Bosques de Saloya.
Por su parte, la Secretaría de la Defensa Nacional, a través de la Comandancia de la 30/va Zona Militar, hizo recorridos en Centro y zonas limítrofe con Nacajuca.
Fue en el Jardín de Niños 'Leona Vicario', donde se aplicó el Plan DNIII ante la caída de una barda perimetral.
