HECELCHAKÁN. – La creciente indignación por el colapso en el sistema de limpieza pública alcanzó un punto crítico la tarde de este domingo. Ante la persistente ausencia de camiones recolectores en diversos sectores de la ciudad, un grupo de ciudadanos organizados tomó la decisión de trasladar sus desechos domésticos hasta las puertas del Palacio Municipal, depositándolos en la entrada principal como una medida de presión directa contra la administración local.
Esta manifestación busca interpelar de manera urgente al presidente municipal, Sebastián Yam Poot del partido Movimiento Ciudadano, exigiéndole que instruya a la Dirección de Servicios Públicos para normalizar el servicio de manera inmediata. Los residentes denuncian que la acumulación de residuos en las viviendas y calles de la cabecera municipal y sus barrios ha dejado de ser un problema logístico para convertirse en una emergencia de salud pública.
Los afectados recalcaron que la situación es insostenible debido a que la basura descompuesta genera olores fétidos y la proliferación de fauna nociva e insectos. Este escenario representa un riesgo latente de focos de infección que vulnera especialmente a la población más frágil, como niños y adultos mayores. Los inconformes subrayaron que esta acción no es un evento aislado, sino la culminación de semanas de irregularidades y promesas incumplidas.
Hasta el momento, la ciudadanía permanece a la espera de un compromiso formal y una respuesta eficaz por parte de las autoridades municipales. La demanda es clara: priorizar el bienestar y la sanidad de las familias de Hecelchakán antes de que la problemática escale a niveles de mayor gravedad ambiental.
