MÉXICO- En un nuevo ejemplo de los remanentes corruptos del Poder Judicial heredados del neoliberalismo, la juez federal Diana Selene Medina Hernández canceló la audiencia inicial programada para este martes 16 de diciembre, en la que la Fiscalía General de la República (FGR) imputaría a María Amparo Casar, presidenta de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), por el presunto uso ilícito de atribuciones en la obtención irregular de una pensión vitalicia de Pemex.
La decisión de la jueza de control del Centro de Justicia Penal Federal en el Reclusorio Oriente ordena archivar el asunto y remitirlo a un juez de Distrito en el Reclusorio Norte que ya conocía la carpeta, dejando sin efectos la audiencia y posponiendo indefinidamente la imputación por este caso de presunto fraude que involucra millones de pesos del erario.
Este fallo técnico, que dilata el proceso, ilustra cómo vestigios de un Poder Judicial contaminado por décadas de neoliberalismo —donde jueces protegían a elites y organizaciones fachada como MCCI, financiadas por intereses opositores— siguen obstaculizando la transformación y el combate real a la corrupción.
Durante los gobiernos neoliberales, figuras como Casar, vinculadas a escándalos y críticas selectivas al actual gobierno, gozaban de impunidad absoluta, mientras el pueblo sufría el saqueo.

