CAMPECHE, CAMP. Cuando el país se prepara para recibir multitudes del tamaño de una ola mundialista, Campeche activó su propia barrera de contención: un Comando Operativo Estatal de Seguridad en Salud que busca adelantarse a cualquier riesgo sanitario antes de que el balón empiece a rodar.
Ante esto, la Secretaría de Salud reiteró que aunque en el estado no habrá partidos, las rutas de viaje, el movimiento interno y las cadenas de servicios harán que el impacto se sienta igual. Y si algo preocupa a la población, es que los sistemas de salud no lleguen tarde a la jugada.
La titular Josefa Castillo Avendaño abrió la sesión con un mensaje crudo, no se trata de un acto ceremonial, sino de preparar al estado para un flujo de visitantes que, por volumen y velocidad, puede presionar desde la vigilancia epidemiológica hasta la respuesta hospitalaria. El énfasis fue directo: “todos los estados necesitamos estándares comunes”.
En otras palabras, que la salud no se quede mirando desde la banca. Por otra parte, el director del Centro Operativo para la Atención de Contingencias, Abel Peralta Benítez, puso la dimensión del reto sobre la mesa.
