CDMX.- Con banderas tricolor y guinda ondeando al viento, con tambores, matracas y el grito unísono de “¡Ni un paso atrás!”, decenas de miles de personas procedentes de todo el país tomaron el Zócalo capitalino para festejar los siete años de la Cuarta Transformación y demostrar que el respaldo popular a la presidenta Claudia Sheinbaum sigue más vivo que nunca.
Desde las primeras horas, contingentes que partieron del Ángel de la Independencia comenzaron a desfilar por Reforma. Cuatro horas después, la plaza y las calles aledañas seguían recibiendo caravanas.
No había un solo espacio libre: el mar humano desbordó el primer cuadro de la ciudad. “Vine desde Xochimilco con mis amigas para demostrar que somos muchísimos los que respaldamos al gobierno”, cuenta Cristina, una mujer de la tercera edad que lleva una bandera mexicana bordada a mano. “Los presidentes de antes saquearon todo lo que pudieron. Ahora veo que sí hay cambio: mi pensión me alcanza, mis nietos tienen beca… y Claudia es una mujer inteligente que ha sabido defender a México afuera”.
A su lado, Ángel Pavón, originario de Puebla, levanta un cartel que dice “Estamos con Claudia en defensa de la patria”. Para él, la marcha de hoy es la respuesta a quienes piden intervención extranjera: “Hay senadores y dirigentes que se dicen mexicanos pero le hacen el juego a Trump. Esos son traidores a la patria.

