CAMPECHE, CAMP. Cuando la arena se enfría y el oleaje apenas murmura, una silueta ancestral se arrastra hacia la orilla. Es la tortuga Carey, especie que, año tras año, convierte las playas de Campeche en su santuario.
Y en esta temporada en lo que resta del año, su retorno no ha pasado desapercibido, más de 4,900 nidos y más de 404 mil huevos han sido monitoreados a lo largo del litoral campechano.
Su retorno masivo no solo marca una diferencia numérica, sino también simbólica, es la especie de tortuga que más se aferra a estas playas, la que parece recordarle al mar que aquí aún hay un hogar dispuesto a protegerla. Así lo informó la Secretaría de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambio Climático y Energía (SEMABICCE).
El Consejo Consultivo Tortugueros de Campeche que monitorea los 15 campamentos activos que protegen la vida marina, señalaron que, a diferencia de sus primas marinas, la Carey ha sido la gran protagonista de esta temporada. La tortuga Blanca apenas suma 279 nidos con 9,939 huevos, y la Lora apenas un nido con 109 huevos.
La primera arribazón de la temporada se registró el 9 de abril en el campamento de Punta Xen, operado por el Grupo Ecologista Quelonios A.C., donde también ocurrió la primera eclosión a finales de junio, 90 crías que abrieron los ojos al mundo bajo la luz de la luna.

