CAMPECHE, CAMP. El río Palizada, ese gigante que durante semanas mantuvo en vilo a cientos de familias ribereñas, dio un respiro. “Hasta ahora no existe riesgo, y es importante destacar que el dragado realizado ha evitado desbordamientos”, declaró la gobernadora Layda Sansores San Román, al confirmar que las aguas se mantienen bajo control.
La mandataria informó que personal de la Secretaría de Marina y de Protección Civil del Estado permanece desplegado en la zona para auxiliar a las comunidades cercanas al cauce, en caso de ser necesario. Además, llamó a la población a no arrojar basura al río y denunciar a quienes lo hagan al 911 o 089, recordando que los desechos son uno de los factores que más afectan el flujo del afluente.
El mensaje representa un alivio para las 8,600 personas que habitan en las márgenes del Palizada. De acuerdo con Protección Civil estatal, el nivel del río descendió cuatro centímetros en las últimas 24 horas, ubicándose en 5.00 metros sobre el nivel del mar, apenas 20 centímetros por debajo del Nivel de Aguas Máximas Ordinarias (NAMO), el punto donde suelen comenzar las inundaciones.
En comunidades como “El Salto y La Toza”, donde hace apenas unos días se colocaron más de 3 mil costales de arena, los vecinos observan cómo el agua retrocede lentamente. Aunque la tensión no desaparece, la calma empieza a sentirse, esto por la presencia de autoridades realizando un monitoreo constante y otras medidas preventivas.
En Palizada, donde el agua siempre ha sido aliada y amenaza a la vez, el descenso del nivel del río se siente como una tregua ganada. Y detrás de esa calma, el mensaje de Sansores resume la jornada, el dragado funcionó, el río resiste y la gente puede respirar otra vez.
