CAMPECHE, CAMP. Más de 72 familias de transportistas de Calkiní arribaron este viernes al Palacio de Gobierno para exigir operativos inmediatos que frenen el transporte pirata en su municipio, una práctica que, dicen, reduce sus ingresos y desordena el tránsito local. Piden también que la Agencia Reguladora del Transporte (ARTEC) cuente con una autoridad con capacidades para mediar y ordenar el sector.
Mayreli Uc Tun, quien encabezó la comitiva, explicó con voz tensa y momentos de frustración que la competencia proviene, en muchos casos, de vehículos con placas particulares que prestan servicios sin regulación. “No estamos en contra de quienes quieren regularizarse; lo que pedimos es que las familias que trabajan de manera legal tengan protección y se cumplan las normas”, afirmó.
El reclamo central es práctico, operativos y reglas claras. Los transportistas lamentan que, ante la ausencia de un titular con mando en la ARTEC, los trámites y resoluciones se dilaten y no exista quien implementé medidas efectivas para combatir la irregularidad. “Necesitamos soluciones, no retrocesos ni trámites que se queden en el papel”, señaló.
Según quienes protestaron, el impacto económico alcanza a unas 72 familias que dependen del servicio formal —con rutas y horarios establecidos— y que ven disminuir sus corridas y ganancias cuando la oferta irregular opera sin controles. Además alertan sobre la afectación al orden vial y al turismo, cuando el servicio informal compite en las mismas rutas.
