CDMX. La reciente emisión de deuda por parte del vehículo de inversión Eagle Funding LuxCo, gestionado por el gobierno de México, ha puesto nuevamente a Petróleos Mexicanos (Pemex) en el centro de la discusión económica.
Ayer, se colocaron bonos en dólares con vencimiento a cinco años, encabezados por JP Morgan, BofA y Citibanamex, a una tasa inicial de 200 puntos básicos sobre los bonos comparables del Tesoro de Estados Unidos.
La operación, busca inyectar entre 7 mil y 10 mil millones de dólares a través de Notas Pre-Capitalizadas (P-caps), responde a la urgencia de fortalecer la posición financiera de la petrolera estatal, cuya deuda al cierre del segundo trimestre ascendía a un billón 866 mil millones de pesos.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que anunció esta estrategia, asegura que estos instrumentos financieros no representan una garantía directa para Pemex, sino un mecanismo para dotar a la empresa de recursos que le permitan atender necesidades operativas y optimizar su perfil de vencimientos.
Según la propia petrolera, esta emisión forma parte de una serie de medidas diseñadas en coordinación con Hacienda y la Secretaría de Energía para mejorar su liquidez y reducir costos financieros.
Pemex destaca que, en los primeros nueve meses de la actual administración, su deuda se redujo en un 5.7%, equivalente a 112 mil millones de pesos, un logro que atribuye a una gestión más eficiente y a nuevas oportunidades de negocio.
Sin embargo, la estrategia no está exenta de cuestionamientos. La emisión de deuda, aunque presentada como una solución temporal, perpetúa la dependencia de Pemex en financiamientos externos para mantenerse a flote.
La petrolera, pilar histórico de la economía mexicana, arrastra un lastre financiero que parece no encontrar un punto de inflexión definitivo.
Si bien la reducción de deuda reportada es un paso positivo, el monto sigue siendo abrumador, y la falta de claridad sobre los “mecanismos financieros” que se anunciarán en las próximas semanas genera incertidumbre.
Destaca utilidad de 60 mmdp La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo celebró la utilidad neta de 60 mil millones de pesos reportada por Petróleos Mexicanos (Pemex) durante el segundo trimestre de 2025. En conferencia matutina, anunció que en los próximos días se ofrecerán detalles más amplios sobre este logro financiero, que refleja los esfuerzos de su administración por fortalecer a la empresa estatal.
Sheinbaum resaltó que su gobierno ha trabajado intensamente para revitalizar a Pemex, implementando medidas como la reducción del número de consejos de administración y la integración vertical de la empresa.
Estas acciones buscan optimizar sus operaciones y garantizar su sostenibilidad económica, en un contexto de retos financieros y presiones internacionales en el sector energético.
La mandataria destacó que la visión de largo plazo para Pemex incluye alcanzar una producción de
1.8 millones de barriles diarios de
petróleo.
Este objetivo, según Sheinbaum, no solo fortalecerá la soberanía energética de México, sino que también consolidará a la empresa como un pilar estratégico para el desarrollo económico del país.
El anuncio de la utilidad neta llega en un momento clave, tras años de dificultades financieras para Pemex, que ha enfrentado deudas significativas y críticas por su gestión.
Sheinbaum subrayó que los resultados positivos son fruto de una estrategia integral que combina eficiencia operativa, disciplina financiera y una reestructuración interna enfocada en la productividad. La presidenta llamó a la ciudadanía a confiar en el proyecto de fortalecimiento de Pemex, asegurando que la empresa seguirá siendo un motor de desarrollo nacional. Además, reiteró el compromiso de su gobierno de transparentar los resultados financieros y operativos de la petrolera, con el objetivo de mantener informada a la población sobre los avances en este sector estratégico.
