CAMPECHE, CAMP. La selva campechana aún respira… pero aún faltan acciones para reforzar su protección. Por eso, el diputado local Carlos Ucán Yam lanzó un llamado a sumar fuerzas entre los tres niveles de gobierno y el Congreso del Estado para frenar la deforestación que amenaza los pulmones verdes del territorio.
Ante esto, puso sobre la mesa una propuesta clara: trabajar en equipo, desde lo legal y lo político, para identificar qué territorios están siendo afectados y qué factores sociales y económicos están detrás del avance implacable del desmonte. “Tenemos que intervenir todos: los gobiernos y el Congreso. No solo es un tema legal, también se necesita voluntad política”, expresó.
Ucán Yam destacó que uno de los aciertos del actual gobierno federal fue impulsar la reforestación en zonas antes abandonadas o degradadas, y ahora —afirmó— toca al Congreso local continuar ese camino desde su trinchera, proponiendo leyes, exhortos y evaluaciones en comisiones para frenar el daño ambiental.
Aunque reconoció que el tema de la deforestación ha sido polémico, el diputado pidió no simplificar el problema culpando solo a los menonitas. “Sí, hay deforestación de parte de ellos, pero también tenemos datos que indican que hay gente local que deforesta con mayor gradualidad y mayor impacto”, señaló, abriendo la conversación a una visión más integral.

