CAMPECHE, CAMP. Cae agua del cielo como si el Golfo de México llorara. Aunque el disturbio tropical que se forma frente a las costas de Florida parece lejano, ya está haciendo leves estragos en Campeche. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) advirtió que se vienen lluvias fuertes, de 50 a 75 milímetros, por lo que lo mejor será no confiarse.
La amenaza se cocina al norte del Golfo, donde una vaguada tropical se alimenta del calor del mar y la calma de los vientos en altura. A simple vista, no parece gran cosa, ya que el Centro Nacional de Huracanes le da apenas un 10% de probabilidad de convertirse en ciclón en los próximos días. Pero no se necesita un huracán para que el cielo se desahogue con furia.
En Campeche, ya se sienten los efectos de esta “cola de disturbio”. Las calles que no han terminado de secarse vuelven a llenarse de precipitaciones que no duran. Las familias comienzan a revisar techos, ventanas y niveles del río. El aire huele a humedad, y las nubes no descansan.
Los expertos explican que, aunque el sistema tropical está lejos, su influencia sí alcanza a la Península de Yucatán. Su presencia provoca una extensa vaguada que vuelve inestable el clima local: lluvias fuertes, ráfagas de viento y tormentas eléctricas podrían repetirse sin previo aviso.
