CDMX – En un mundo marcado por la incertidumbre geopolítica y económica, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, emerge como una figura clave en la defensa de los intereses nacionales y la construcción de un futuro próspero para el país. Su participación en la Cumbre del G7 en Kananaskis, Canadá, es un testimonio de su visión estratégica para fortalecer la economía mexicana mediante alianzas internacionales sólidas.
Aunque la inesperada salida del presidente estadounidense Donald Trump frustró un encuentro bilateral en el marco del foro, la mandataria aprovechó al máximo su agenda, consolidando la relación con Canadá y sentando las bases para una reunión crucial con Trump en los próximos días en Washington. Terminando la cumbre viajará a Estados Unidos para encontrarse con su homólogo.
Según reportes, el presidente estadounidense decidió regresar a Washington para encabezar reuniones urgentes con su equipo de seguridad nacional, dejando inconclusas algunas discusiones del G7.
Este imprevisto impidió el diálogo directo con Sheinbaum, quien había planeado abordar temas críticos como el comercio, la migración y la cooperación energética en el marco del T-MEC.
Sin embargo, fuentes cercanas a la presidencia mexicana, confirmaron que ambos líderes están coordinando un encuentro en Washington la próxima semana, lo que refleja la importancia que ambos otorgan a la relación bilateral.
