CDMX. – Con gran entusiasmo, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) dio a conocer un comunicado oficial en el que celebra la elección del Cardenal Robert Prevost, Prefecto del Dicasterio para los Obispos, como el nuevo Papa, quien asumirá el nombre de León XIV. Este nombramiento, resultado de la cuarta sesión de votación de los cardenales electores, marca al Cardenal Prevost como el 267° Sucesor de Pedro, una noticia que ha llenado de júbilo a la Iglesia católica en México y el mundo.
En el comunicado, firmado por destacados representantes de la CEM, encabezados por el Obispo de Cuernavaca, Mons. Ramón Castro Castro, como presidente, los obispos mexicanos expresaron su profunda alegría y confianza en que esta elección fue guiada por el Espíritu Santo. “Estamos ciertos que el Espíritu Santo ha guiado esta elección, en ella reconocemos la voluntad de Jesucristo que en la persona y ministerio del Papa nos seguirá guiando para cumplir con fidelidad la misión que la Iglesia y el mundo necesitan en este momento de la historia”, señala el texto.
UN PAPA PARA LA UNIDAD Y LA COMUNIÓN
El documento cita el Concilio Vaticano II, específicamente la constitución Lumen Gentium (LG 18), para subrayar el papel del Papa como “principio y fundamento, perpetuo y visible, de la unidad de fe y de comunión” en la Iglesia. Los obispos destacaron que, al igual que Jesucristo envió a sus Apóstoles, los sucesores de estos, los obispos, continúan siendo pastores bajo la guía del Santo Padre, quien ahora, en la persona de León XIV, liderará a la Iglesia universal hacialos desafíos del presente.
