CAMPECHE, CAMP. Con la llegada de la temporada de calor y los cambios climáticos que siempre nos sorprenden, la seguridad y el bienestar de los niños y maestros se vuelven la prioridad número uno en las aulas de la región, por lo que habría un cambio en los horarios escolares ante estos efectos.
Así lo aseguró Roberto Herrera Maas, subsecretario de Educación Básica y Normal, quien destacó que la coordinación con la Secretaría de Protección Civil es clave para tomar decisiones rápidas y efectivas frente a fenómenos meteorológicos.
Manifestó que, si la ola de calor se torna insoportable, las medidas adoptadas serán las mismas que el año pasado: ajustar los horarios escolares para que los pequeños puedan disfrutar de su día sin la amenaza del sol ardiente.
Y es que, aunque el frente frío puso pausa un rato al calor, los efectos serán temporales, ya que las altas temperaturas no darán tregua y para evitar que menores sufran las consecuencias de las altas temperaturas, se optará por adelantar las clases o terminar más temprano.
Herrera Maas explicó que esta decisión no solo busca cuidar la salud de los alumnos, sino también la de los profesores, quienes también son expuestos a las inclemencias del tiempo. Es un esfuerzo conjunto que tiene como objetivo hacer frente a un clima cada vez más impredecible y, por supuesto, proteger a quienes confían en la educación para garantizar su futuro.
Para los padres y maestros, el anuncio es un alivio, pues la estrategia busca no solo adaptarse al calor extremo, sino también evitar que el tiempo de exposición al sol se convierta en un riesgo para la salud. La medida parece ofrecer una solución viable, pero también plantea preguntas sobre cómo se manejarán las clases en los días de frío o lluvias intensas, que también pueden interferir en el ritmo escolar.
