CAMPECHE, CAMP. En los últimos días, el calor que parecía no tener fin se disipó repentinamente sobre Campeche, con la llegada del Frente Frío No. 37 “Mahaná”. En su paso por la Península, no solo trajo consigo una baja drástica en las temperaturas, sino que sorprendió a campechanos con fuertes ráfagas de viento y leves lluvias que marcaron el inicio de un periodo más fresco, pero también de incertidumbre climática.
Según datos del Servicio de Meteorología, el pronóstico meteorológico es que, en las próximas horas, una masa de aire polar seguirá influyendo en la región, las temperaturas continuarán por debajo de los 30°C, lo que no solo traerá alivio ante el calor extremo, sino también condiciones que podrían favorecer la formación de trombas marinas y actividad eléctrica en zonas costeras.
Aunque la intensidad de los vientos disminuirá, con ráfagas de entre 10 y 40 km/h, los meteorólogos advierten que la presencia de la masa de aire polar podría seguir modificando el clima de la zona. Los termómetros se mantendrán entre los 11°C y los 16°C en zonas del interior, mientras que el resto de la región vivirá mañanas frescas, pero con una gradual subida en las temperaturas hacia los 36°C en las horas de calor.
UN ALIVIO PARA CAMPECHANOS
Campechanos vivieron una mezcla de calma y alerta, pues las lluvias que caían, aunque ligeras, anunciaban más cambios. Y es que, desde el jueves pasado, las primeras señales del fenómeno fueron notorias en la región: ráfagas que removían las hojas secas, nubes grises que cubrían el cielo y un aire inusualmente frío que tocaba la piel.
Autoridades por otra parte, llamaron a habitantes a extremar precauciones ante este giro climático y mantenerse informados sobre la evolución del fenómeno que, aunque menos agresivo que sus hermanos anteriores, sigue siendo una amenaza por su capacidad de cambiar las reglas del juego meteorológico.
