CAMPECHE, CAMP. En las calles de Campeche, un acto cotidiano como tirar agua parece inofensivo, pero esconde un problema mayor: daños a la vialidad, riesgo de accidentes y multas que pueden llegar hasta las 500 Unidades de Medida Administrativas (UMAs).
Ante esto, la titular de la Dirección de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Karla Gisselle Rodríguez reconoció que ha levantado 479 multas en lo que va del mes por esta práctica, que no solo es ilegal, sino que también afecta la infraestructura y la calidad de vida de los ciudadanos.
De igual forma, reveló que mensualmente se reciben alrededor de 600 reportes por vertimiento de aguas jabonosas y residuales en la vía pública.
“Es una práctica prohibida en el Bando Municipal, y aunque recibimos entre 10 y 20 quejas diarias, muchos ciudadanos aún no son conscientes del daño que causan”, afirmó. Además de las multas, que van desde 10 hasta 500 UMAs, el vertimiento de agua genera grietas en el asfalto, lo que deriva en baches y, en consecuencia, accidentes viales.
TREMENDO DESPERDICIO Y DAÑO
El agua vertida en las calles no solo es un desperdicio del vital líquido, especialmente en temporada de sequía, sino que también contamina y debilita la carpeta asfáltica. “El agua se filtra y erosiona la base de las calles, lo que a la larga genera baches y deterioro en la infraestructura pública”, explicó Rodríguez Tec.
