CDMX.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que decidió otorgar “un pequeño respiro” en la imposición de aranceles a México y Canadá, medida que, según afirmó, busca “ayudar” a sus vecinos del norte y sur. Sin embargo, dejó claro que esta pausa concluirá el próximo 2 de abril, cuando entrarán en vigor sus llamados aranceles “recíprocos”. “Quería ayudar a México y Canadá.
Somos un país muy grande y ellos hacen muchos negocios con nosotros, mientras que en nuestro caso es mucho menos significativo”, explicó Trump.
El mandatario justificó esta decisión destacando la importancia del comercio con ambos países, aunque minimizó su relevancia para Estados Unidos.
Según datos del Departamento de Comercio, en 2024 las exportaciones estadounidenses a Canadá alcanzaron los 440 millones de dólares, mientras que a México sumaron 393 millones, consolidándolos como los principales destinos de los productos norteamericanos, gran parte de ellos bajo el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Pensé que sería justo darles un pequeño respiro hasta el 2 de abril”, afirmó Trump, añadiendo que también buscaba apoyar a los fabricantes de automóviles estadounidenses.
Los aranceles “recíprocos” que Trump planea implementar a partir de esa fecha gravarán los productos de Canadá y México al mismo nivel que estos países impongan a las exportaciones estadounidenses.
Actualmente, los bienes que cumplen con las reglas del T-MEC ingresan a ambos países sin pagar impuestos, lo que ha generado un comercio fluido en la región. Sin embargo, el presidente insistió en que, a partir del 2 de abril, “todo se vuelve recíproco: lo que ellos nos cobren, se lo cobramos. Es un gran acuerdo”.
El anuncio llega tras un vaivén de decisiones arancelarias. A principios de febrero, Trump había amenazado con imponer aranceles del 25% a todos los productos provenientes de Canadá y México, y del 10% a los hidrocarburos canadienses, acusando a ambos países de no hacer lo suficiente para frenar el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos.
Tras pausar la medida por un mes para permitir negociaciones, los aranceles entraron en vigor el pasado martes, pero finalmente dio marcha atrás y suspendió la mayoría hasta abril.
Esta no es la única acción comercial reciente de Trump. En paralelo, el presidente impuso un 20% de tarifas adicionales a los productos chinos, aplicadas en dos fases desde principios de febrero, como parte de su estrategia para equilibrar la balanza comercial y presionar a sus socios internacionales. Con esta combinación de políticas, Trump busca reafirmar su visión de reciprocidad económica, aunque su enfoque ha generado incertidumbre en los mercados y tensiones con aliados clave como México y Canadá.
