La energía geotérmica está en auge gracias a las grandes empresas tecnológicas que buscan alimentar sus centros de datos de inteligencia artificial, pero las inversiones a largo plazo siguen siendo inciertas mientras las grandes petroleras apuestan por el gas natural.
Meta y Google, son algunas de
las firmas tecnológicas que se asociaron con empresas emergentes que proponen producir electricidad geotérmica para alimentar sus centros de datos.
Los grandes operadores de centros de datos también se apresuran a satisfacer las necesidades energéticas de la inteligencia artificial, acelerando una serie de tecnologías limpias en el proceso.
“Creemos que la geotermia, junto con la abundancia de gas natural, puede formar parte de la combinación de todas las energías que necesitamos para satisfacer la demanda”, dijo Trey Lowe, director de tecnología del productor estadounidense de gas de esquisto Devon Energy, inversor en la nueva empresa geotérmica Fervo Energy.
La geotermia se promocionó como una forma más rápida degenerar electricidad libre de carbono que la nuclear, y sin la intermitencia de la eólica y la solar. Pero las empresas emergentes siguen enfrentándose a elevados costos iniciales, sobre todo de perforación, y a largos plazos de aprobación de los proyectos.
Esto agrió parte del entusiasmo inicial, con inversiones limitadas hasta ahora: los analistas estiman que se han aportado poco más de 700 millones de dólares en financiación a proyectos geotérmicos en general desde 2020.
Los principales productores de petróleo de esquisto como Chevron, Diamondback Energy y Exxon Mobil también empezaron a abogar por el gas natural como combustible principal para la energía eléctrica, ofreciéndose a trabajar con las empresas de servicios públicos para acoplar sus centrales eléctricas a proyectos de secuestro de carbono que reduzcan las emisiones de efecto invernadero.
“En general, hay mucho más interés por parte de los pequeños productores de petróleo y gas, así como de las empresas de servicios (…) Hemos hablado con Chevron y Shell, pero las grandes compañías parecen estar más a la expectativa”, afirma Cindy Taff, Directora General de Sage Geosystems, que desarrolla tecnologías de almacenamiento de energía y carga geotérmica en las profundidades de la tierra.