CAMPECHE, CAMP.– La mañana del 26 de noviembre se iluminó con el fervor y la devoción de la primera edición de la “Antorcha Sacerdotal Guadalupana”, pues desde muy temprano, más de una decena de sacerdotes y diáconos de la Diócesis de Campeche, tomaron las calles en un recorrido lleno de fe que culminó en el Santuario de la Virgen de Guadalupe.
Encabezados por el Obispo Monseñor José Francisco González y González, realizaron una caminata lo que fue todo un despliegue de entrega y esfuerzo por parte del clero. Desde la Parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación en Fidel Velázquez, los participantes de la modalidad caminata atravesaron el manglar, la avenida Costera y el malecón para llegar al santuario.
Con esta primera edición, rindieron homenaje a la Virgen de Guadalupe y fortalecer la fe de la comunidad. Fue una manifestación de devoción y unidad entre los sacerdotes, diáconos, seminaristas y miembros de la comunidad religiosa, quienes realizaron el recorrido como un acto de oración y preparación espiritual.
TRES CAMINOS, UN SOLO DESTINO
En paralelo, otros sacerdotes pedalearon desde la Parroquia de la Asunción en Tenabo, mientras que el grupo de corredores partió desde San Francisco de Kobén.
Cada ruta estuvo marcada por un espíritu de unidad, mientras los participantes demostraban su amor por Nuestra Madre Santísima de Guadalupe.
La caminata reunió a más de 10 sacerdotes, acompañados por seminaristas y miembros de la comunidad. Figuras destacadas como el Pbro. Marcos Cohuo Muñoz, de la Parroquia San José Obrero, y el P. Luis Miguel Vargas, del Seminario Menor “San Felipe de Jesús”, se sumaron al recorrido junto con otros líderes eclesiásticos.
SEGURIDAD Y FE EN CADA PASO
La Policía Local y el equipo de Médicos por la Vida estuvieron presentes para garantizar la seguridad y el bienestar de los participantes. Tras el emotivo trayecto, el evento concluyó con una solemne misa presidida por el Obispo González y González, en un momento que unió oración, preparación espiritual y una profunda devoción mariana.
Esta primera edición de la Antorcha Sacerdotal Guadalupana dejó una huella de fe y esperanza, consolidándose como una celebración que seguramente se convertirá en tradición.
