MÉXICO.- En un momento histórico para México, la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo demostró una vez más su liderazgo y capacidad diplomática al sostener su primera reunión presencial con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en el marco de la Cumbre de Líderes del G20 en Brasil. Este encuentro, aunque breve, es un parteaguas en la relación bilateral al reafirmar la importancia de trabajar juntos frente a desafíos comunes como la migración, el crimen trasnacional y la economía global.
El diálogo entre ambos mandatarios no fue simplemente un acto protocolario; fue una muestra de la evolución de México en la arena internacional. La postura de Sheinbaum Pardo, firme pero colaborativa, dejó claro que la relación entre México y Estados Unidos se basa en el respeto mutuo y en una visión compartida de prosperidad para América del Norte.
Por su parte, Joe Biden, al reconocer la reciente elección de Sheinbaum, dejó en claro su compromiso de continuar fortaleciendo esta asociación estratégica, destacando la necesidad de enfrentar juntos el tráfico de drogas y la violencia criminal trasnacional.
Más allá de los acuerdos específicos, lo que destacó fue el tono de la conversación: un diálogo “de par a par”, como lo calificó Natalia Molano, vocera en español del Departamento de Estado estadounidense.
