Desde el inicio del sexenio de Andrés Manuel López Obrador, con Octavio Romero Oropeza al frente de Pemex, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) comenzó a poner lupa sobre Cotemar. Las irregularidades detectadas en esta empresa, que brindaba servicios a Petróleos Mexicanos, no eran nuevas.
Y es que desde el 26 de febrero de 2018, la Secretaría de la Función Pública (SFP) abrió una investigación, que se le dio vista a la Fiscalía Genera de la República (FGR) y que sigue hasta la fecha sobre pagos indebidos por más de 240 millones de pesos entregados a Cotemar a través de dos contratos.
Cotemar, empresa dedicada a la construcción y mantenimiento de ductos y plataformas, prestación de servicios de hospedaje y renta de embarcaciones, acumuló durante el sexenio de Enrique Peña Nieto contratos por 44 mil millones de pesos. De estos, 7 fueron adjudicados de manera directa, sin competencia alguna.
Además de ser una de las consentidas de Pemex, Cotemar ha sido protagonista de tragedias. El 1 de abril de 2015, un incendio en la plataforma Abkatún A, operada por Cotemar en la Sonda de Campeche, cobró la vida de siete trabajadores y dejó a otros 16 heridos. Las pérdidas materiales superaron los 780 millones de dólares. Y a pesar de ese oscuro historial, Cotemar continuaba recibiendo contratos millonarios.
SIEMPRE BENEFICIADA, PESE A DEMANDAS
En 2018, la Comisión Nacional de Hidrocarburos aprobó el aplazamiento de las licitaciones de las rondas 3.2 y 3.3 hasta febrero de 2019. Sin embargo, fuentes de Pemex confirmaron que Cotemar estaba en trámite para recibir un nuevo contrato, lo que muestra que, pese a los escándalos y las investigaciones en su contra, la empresa seguía siendo beneficiada.
Las irregularidades de Cotemar no eran nuevas. En 2014, la ASF detectó que Pemex no pudo comprobar trabajos realizados por la empresa por mil 866 millones 621 mil pesos.
La auditoría de ese año advirtió la falta de evidencia documental en 10 órdenes de trabajo bajo el contrato clave 428233858, y Pemex intentó justificar la falta de documentación con la entrega de un disco con información supuestamente relevante. Pero tras revisar ese material, la ASF determinó que las observaciones seguían vigentes.
EVASIÓN DE RESPONSABILIDADES
En otro caso, la Auditoría Superior de la Federación documentó que Cotemar se negó a cubrir los gastos derivados del hundimiento de la plataforma Júpiter I el 12 de abril de 2011. En ese incidente, la plataforma prestaba servicios de hospedaje a trabajadores de Pemex en la plataforma Abkatún A, en Campeche.
Pemex tuvo que desembolsar 57.7 millones de pesos y 2 millones 576 mil dólares para el rescate de personas y mitigar riesgos, pero Cotemar se deslindó de su responsabilidad alegando que el hundimiento fue producto de un “caso fortuito”. Sin embargo, la ASF señaló que esta negativa violaba la Ley de Navegación y Comercio Marítimo, que establece que el propietario de una embarcación es responsable de los daños causados a terceros en caso de siniestros.
A pesar de todo este historial, Cotemar continuaba operando bajo una red de impunidad que parecía extenderse sexenio tras sexenio. Mientras las investigaciones de la ASF y la SFP seguían abiertas, la empresa continuaba ganando contratos en Pemex, la empresa productiva del Estado.
SE LAVA LA CARA CON RECURSOS PÚBLICOS… PARA GANAR BENEFICIOS
Cotemar es una de las empresas que ha destinado recursos para el desarrollo social de las entidades donde realiza los trabajos contratados por Pemex, mediante el Programa de Apoyo Comunitario y Medio Ambiente (PACMA), el cual ha entregado apoyos como ambulancias, unidades médicas y patrullas en Tabasco, y fue la que equipó la unidad que tiene la Semar dentro de la terminal marítima Dos Bocas en 2018.
Cabe mencionar que estos apoyos, destinados por los contratistas de Pemex, entre ellos Cotemar, sirvieron para que funcionarios de Petróleos Mexicanos recorrieran la entidad.
DESACATO AL PRESIDENTE
A pesar de la orden presidencial de que Pemex despachara en Campeche, funcionarios petroleros recorrian Tabasco entregando apoyos comprados por empresas como Cotemar, a pesar de los cuestionamientos.
Finalmente, de forma extraordinaria, Cotemar, a través de una subsidiaria, fue la que donó un helicóptero al gobierno del estado a finales de 2022.
Durante años, la empresa ha mantenido relaciones estrechas con altos ejecutivos de Pemex, lo que ha permitido que los contratos sigan fluyendo a pesar de los constantes accidentes y las violaciones a las normas de seguridad laboral.