MÉXICO. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, calificó como “fuera de la norma” las consultas realizadas por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) respecto a su intervención en la reforma judicial. En su conferencia de prensa matutina, expresó que esta decisión no tiene sustento y la describió como un “golpe aguado, no un golpe de Estado”.
Argumentó que los ocho ministros que votaron a favor buscan provocar una respuesta autoritaria por parte de su gobierno, señalando que “quieren que digamos juicio político y demostrar que somos autoritarios”. No obstante, la mandataria reafirmó el carácter democrático de su administración, subrayando que la reforma judicial “fue avalada por el pueblo”, y reiteró que no caerán en provocaciones.
Asimismo, agregó: “No vamos a caer en provocaciones”, en respuesta a la reciente votación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que decidió que sí puede analizar la constitucionalidad de la Reforma al Poder Judicial, una iniciativa impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Con ocho votos a favor y tres en contra, la Corte admitió la consulta, lo que desató una serie de reacciones del Ejecutivo.
