MÉXICO- El sol apenas despuntaba cuando los primeros simpatizantes de la Cuarta Transformación comenzaron a llenar las calles que conducen al corazón de la Ciudad de México. Llegaron de todos los rincones del país, uniendo sus voces y esperanzas en una marea humana que se dirigía con¿ fervor al Zócalo para escuchar el Sexto Informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Los ríos de gente fluían por las avenidas principales, y en cada esquina, los puestos de recuerdos y “Amlitos” se erigían como altares improvisados para honrar al líder que, según ellos, ha transformado la nación.
Las calles de 20 de Noviembre, Eje 1 Norte, Eje 1 Oriente, José María Izazaga, Fray Servando Teresa de Mier y Eje Central Lázaro Cárdenas se convirtieron en pasillos de mercado donde se ofrecían figuras de cerámica, peluches, plastilina, fotos, tazas, playeras, gorras, “manitas” y posters, todos con el rostro sonriente de Andrés Manuel López Obrador (AMLO). No era solo la compra de un recuerdo; era llevarse un pedazo de esta fiesta popular, un símbolo de gratitud hacia el hombre que, para muchos, había cumplido sus promesas.
Incluso, algunos comerciantes vendían en 50 pesos cartulinas con frases como “Es un honor estar con Obrador”, para aquellos olvidadizos que no elaboraron sus cartelones.