CAMPECHE.- Durante la noche de ayer, fuertes lluvias azotaron al estado, por lo que reportes del Servicio Meteorológico Nacional indicaron que estos efectos continuarán. Ante esto, el municipio de Hopelchén fue el más golpeado por inundaciones en carreteras y colonias, así como deslaves.
Las calles se convirtieron en verdaderos ríos debido al exceso de agua, obstaculizando el tránsito vehicular y poniendo en riesgo la seguridad de los habitantes. Los deslaves de cerros contribuyeron a la inundación de áreas urbanas y suburbanas, como Ukum, donde la acumulación de basura obstruyó los desagües, empeorando la situación.
Ante esto, el director de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del Ayuntamiento de Hopelchén, Irving Collí Chi, atribuyó los daños principalmente a la acumulación de basura que bloquearon los sistemas de drenaje. Esto dejó un deslave parcial del muro de contención del campo de pasto sintético, aunque reconoció que no hubo serios destrozos, solo daños a las guarniciones.
La carretera federal 261 Hopelchén-Campeche también sufrió los embates del temporal, con una lámina de agua que se acumuló peligrosamente en una curva cercana a la ex hacienda “Chun-Cruz”.
Automovilistas fueron advertidos sobre esta situación y se les instó a tomar precauciones adicionales al transitar por la zona.
Mientas que al aguacero y escurrimientos inundaron también la comunidad de Katab, la calle 11 de la colonia Santa Cruz, en la colonia San Isidro, reportaron deslave de cerros en zona de curvas antes de llegar al entronque del poblado de El Poste, en la carretera federal 261 Hopelchén-Bolonchén de Rejón.
La capital no quedó exenta de estos afectos que comenzaron desde las 21:00 horas, lo que dejó inundadas colonias como la avenida Gobernadores, Concordia, Ex Hacienda Kalá, Siglo XXI, las Flores, Flor de Limón y Solidaridad Urbana, que presentó bloqueo total en sus principales arterias, mientras que en otras zonas tuvieron encharcamientos.
El Servicio Meteorológico Nacional pronostica la continuación de lluvias intensas en la región debido a varios fenómenos meteorológicos activos, incluyendo canales de baja presión y ondas tropicales. Se espera que estas condiciones generen tormentas, ráfagas de viento y posibles granizadas, incrementando el riesgo de inundaciones y deslizamientos en áreas vulnerables.