MÉXICO.- Según un reciente informe del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), encabezado por la presidenta general, Valeria Moy, el panorama político y económico de México se encuentra en una coyuntura histórica tras las elecciones del 2 de junio. En estos comicios, más de 20 mil cargos fueron elegidos a nivel federal y local, y los resultados del Instituto Nacional Electoral (INE) revelaron un contundente apoyo a Claudia Sheinbaum Pardo, quien obtuvo 35.9 millones de votos para convertirse en la próxima presidenta.
La coalición MORENA, PT y PVEM, también aseguró seis gubernaturas, la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, y mayorías en ambas cámaras del Congreso.
El IMCO subraya la significativa oportunidad que tiene esta nueva administración para impulsar el progreso y desarrollo del país.
En octubre, México no solo tendrá a su primera presidenta, sino que también sumará cuatro nuevas gobernadoras en Ciudad de México, Guanajuato, Morelos y Veracruz, resultando en un total de 13 mujeres al frente de entidades federativas. Este cambio marca un parteaguas en la representación política de las mujeres y resalta la necesidad de una agenda de género con enfoque en competitividad.
Para capitalizar esta oportunidad, se propone una serie de medidas centradas en la equidad de género, tales como impulsar la educación de las niñas: Implementar jornadas escolares ampliadas para reducir la desigualdad educativa.
Así como mayor participación de mujeres en el mercado laboral: Mejorar la calidad del empleo femenino y garantizar la transparencia y rendición de cuentas del presupuesto para la igualdad sustantiva.
ROBUSTECER LAS CONDICIONES DE VIDA
1. Desarrollo en el sur-sureste: Según el Índice de Competitividad Estatal (ICE), el desarrollo económico de esta región es un reto estructural. Se deben crear condiciones para que los proyectos de infraestructura tengan un impacto positivo en las familias locales.
2. Agenda inclusiva desde un sistema universal de seguridad social: Diseñar políticas públicas que construyan un sistema de retiro robusto y garanticen acceso a servicios públicos esenciales.
3. Calidad en el servicio público de salud: Mejorar el abastecimiento de medicamentos, aumentar la cobertura de vacunación y asegurar la disponibilidad de personal médico especializado.
4. Educación como herramienta de movilidad social: Priorizar un sistema educativo accesible y de calidad, fomentar la recopilación de datos educativos y basar las decisiones en evidencia sólida.
5. Preservación del poder adquisitivo: Acompañar las mejoras en derechos laborales y salarios con políticas monetarias y fiscales que controlen la inflación y el endeudamiento público.
6. Cooperación entre sectores público y privado: Impulsar la inversión privada en la agenda energética para acelerar la transición a fuentes limpias y renovables, y mejorar la infraestructura multimodal.
7. Compromiso con la democracia y el Estado de Derecho: Implementar cambios institucionales para reducir la impunidad y garantizar la pluralidad política en espacios de discusión pública.