NACIONAL.- El Gobierno de México anunció la expropiación de una planta de hidrógeno de Air Liquide ubicada en la refinería de Tula, Hidalgo, operada por Petróleos Mexicanos (Pemex), justificando la medida como necesaria para la seguridad de la producción de gasolinas y diésel.
En su momento, la Secretaría de Energía (SENER) argumentó que la dependencia de un proveedor externo para el hidrógeno ponía en riesgo la operatividad de la refinería. Este movimiento es parte de la estrategia del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), para alcanzar la autosuficiencia en la producción de combustibles.
Sin embargo, el director general de Pemex, admitió ante diputados, que no alcanzará la meta antes de terminar el sexenio.
La asociación entre Pemex y Air Liquide se estableció en 2017, tras la reforma energética aprobada en 2013, con un contrato de 20 años para el suministro de hidrógeno, incluyendo operaciones de una planta existente y la inversión en una nueva unidad.
ENTÉRATE
Esta decisión sigue a una ocupación temporal iniciada hace más de un mes bajo el argumento de utilidad pública.
