CD DEL CARMEN. Con la amenaza de regresar a instalarse al interior del andador y parque principal Ignacio Zaragoza, decenas de integrantes del Sindicato de Comerciantes Ambulantes protestaron una hora en el Ayuntamiento contra el tráfico de influencias de algunos funcionarios y la política represiva de Gobernación Municipal.
Específicamente denunciaron al exjefe de Ingresos y hoy encargado de despacho de la Tesorería, Israel Medina Posadas, “por utilizar sus influencias y posición laboral, para abrir tres establecimientos fijos de comida rápida en lugares estratégicos prohibidos para nosotros”.
Un puesto se ubica en el malecón de la zona Centro, otro en la calle 33, cerca del edificio Administrativo de la Región Marina de Pemex, y el tercero en la 25, frente a la torre Cantarell.
Son espacios privilegiados con acceso a clientes con suficiente poder adquisitivo que le garantizan ganancias redituables, mientras a nosotros no relegan, se quejaron.
Encabezados por Salvador Quintero López, secretario general del Sindicato de Comerciantes Ambulantes, los inconformes expusieron que fueron obligados a abandonar el andador Arturo Shields y la Plaza Roja del parque principal y los alrededores del Santuario Mariano y Diocesano, para recluirlos en el estacionamiento “El Tamarindo”.
Esto propició el desplome superior al 50 por ciento en nuestras ventas, pues el espacio carece de infraestructura e higiene, y no podemos salir en busca de potenciales clientes.
Arribaron a la sede oficial a las 9 de la mañana y se instalaron en el segundo nivel, concretamente frente a las oficinas de Gobernación Municipal.
Quintero López señaló que los funcionarios se creen dueños de la ciudad, y si algún comerciante ambulante quiere buen lugar para colocar su puesto, debe tener dinero para pagar requerimientos de los burócratas municipales.
Acusó tráfico de influencias de algunos funcionarios, y citó como ejemplo a Medina Posadas, cuyos puestos semifijos tienen la leyenda “Bigotón”.
Aprovechó su cargo para que Billy Serrano Espinosa, coordinador de Gobernación Municipal, le extendiera permisos para instalarse y trabajar en los mejores puntos estratégicos para vender comida rápida, y no tiene competencia porque son zonas prohibidas para los ambulantes.
Así mismo, señaló que a manera de burla el alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus da permisos especiales a simpatizantes y amigos para que los domingos instalen puestos en el parque Zaragoza y oferten comida, artesanías y otros productos.
A nosotros no nos permite laborar argumentando que desde su remodelación en 2015, dicho centro recreativo está protegido de ambulantes por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).