El Senado alista la aprobación inmediata de la Ley de Seguridad Interior, donde los votos de los llamados “rebeldes” panistas le dan al PRI un quórum holgado por ser legislación secundaria.
En entrevista, el presidente de la Comisión de Marina, Ricardo Barroso, aseguró que más allá del presupuesto destinado a las fuerzas armadas este sexenio, los resultados dan cuenta de la importancia de que el Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea colaboren con los gobiernos locales en el combate al crimen y en apoyo a la población civil.
Por lo que, a reserva de analizar la minuta turnada por los diputados para determinar si habría algún cambio, la ley deberá aprobarse en lo inmediato.
El legislador dijo que inicia la revisión para presentar el martes o miércoles el análisis y “mandar un mensaje” poder dictaminar.
“Estamos conscientes de la necesidad de la legislación que han pedido las fuerzas armadas, tenemos un gran reconocimiento a esta lucha que han dado contra el crimen organizado y cómo han fortalecido a los estados donde han participado”, resaltó, al confirmar que en el Senado están listos para su discusión y eventual aprobación porque no es un tema nuevo, sino que se ha estudiado en los últimos años.
El legislador priista señaló que la Secretaría Técnica está revisando los documentos, pero en la Comisión de Marina “hasta el momento no la hemos discutido y los coordinadores no se han pronunciado”.
El vicecoordinador del PT-Morena, Miguel Barbosa, dijo que esta reforma es inconstitucional, violatoria de derechos humanos y “un parche más que de nada servirá”, pero que sobre todo obedece a una estrategia político-electoral más que de solución al combate al crimen.
Barbosa Huerta llamó al Senado a actuar con dignidad y que el Congreso de la Unión responda a los intereses de la República “y no a la estrategia electoral del gobierno federal y del PRI”.
Barbosa se pronunció por fortalecer a las policías de los estados y municipios, al destacar que con esta reforma no habrá policías profesionales, sino que de manera inconstitucional las Fuerzas Armadas permanecerán en las calles en funciones de seguridad pública, una actividad que no les compete y que ellas mismas no desean hacer.
“Lo que necesitamos hacer es avanzar en la creación de un nuevo modelo policial y una estrategia integral de combate a la inseguridad y a la corrupción. Pero nada de esto les importó, en la Cámara de Diputados impusieron su voluntad”, señaló.
En entrevistas por separado, los panistas “rebeldes” Roberto Gil y Javier Lozano se pronunciaron a favor de que se otorgue ya a las fuerzas armadas un marco legal que les de certeza en su actuación y ponga límites que impidan violaciones a los derechos humanos.
Gil Zuarth afirmó que se le eliminaron temas que él presentó en su iniciativa, pero que lo convencieron de que la minuta contiene los elementos suficientes, como eliminar el control que tendría el Senado para modificar los plazos de la intervención federal en las entidades, pues ahora sólo la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional tendrá la facultad de vigilar los operativos.
Con sus 62 votos, el PRI sólo necesita tres sufragios para que pase en esta cámara.
Con información de Milenio
