Quienes se dedican a la actividad de captura de escama o bien de camarón siete barbas, como son los pescadores ribereños, quienes en temporadas logran buenas ganancias económicas, sin embargo, los compañeros carecen de cultura para ahorrar dinero cuando obtienen buenas cantidad de capturas, y algunos optan por malgasta el recurso.
Por eso, ese tipo de idea en el que creen que al gastarse el dinero, dicen, “mañana me recupero”, pero en la actualidad es otra, porque es poca la pesca y alto el costo de los combustibles. Y es que ahora al no tener recursos económicos piensan que las autoridades federales y estatales les deben de ayudarlos, expresó José Luis Escalante Morales, presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras Ribereñas, “Rebeldes de la Caleta”.
En estos días, dijo se puede apreciar que algunos se arriesgan al salir a la mar en pleno norte, a pesar que las condiciones climáticas no son favorables para navegar; pero por tratar de ganarse unos pesos, es como ponen en peligro su vida y la de quienes lo acompañan.
Indicó que se obtenía hasta 800 a mil 500 pesos de ganancia por viaje a cada pescador, y en su momento se daban el lujo de gastarse el dinero obtenido, porque al día siguiente podían obtener buena pesca; pero hoy día las cosas cambiaron porque el pescador al salir a la mar, al retornar, si le queda 300 pesos de ganancia es mucho, pero aun así se gasta el 60 por ciento de forma personal, y con los amigos, en bebidas (cervezas), y le lleva lo mínimo a la familia.
Por eso, ese tipo de idea en el que creen que al gastarse el dinero, dicen, “mañana me recupero”, pero en la actualidad es otra, porque es poca la pesca y alto el costo de los combustibles. Y es que ahora al no tener recursos económicos piensan que las autoridades federales y estatales les deben de ayudarlos, expresó José Luis Escalante Morales, presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras Ribereñas, “Rebeldes de la Caleta”.
En estos días, dijo se puede apreciar que algunos se arriesgan al salir a la mar en pleno norte, a pesar que las condiciones climáticas no son favorables para navegar; pero por tratar de ganarse unos pesos, es como ponen en peligro su vida y la de quienes lo acompañan.
Indicó que se obtenía hasta 800 a mil 500 pesos de ganancia por viaje a cada pescador, y en su momento se daban el lujo de gastarse el dinero obtenido, porque al día siguiente podían obtener buena pesca; pero hoy día las cosas cambiaron porque el pescador al salir a la mar, al retornar, si le queda 300 pesos de ganancia es mucho, pero aun así se gasta el 60 por ciento de forma personal, y con los amigos, en bebidas (cervezas), y le lleva lo mínimo a la familia.