El Barcelona superó con facilidad el trámite ante un inofensivo Real Murcia por 5-0 (8-0 global) y, tras un notable segundo tiempo, selló en el Camp Nou el pase a los octavos de final de la Copa del Rey en un choque desigual sin historia.
El equipo azulgrana, liderado por Denis Suárez y con la participación de hasta cuatro jugadores del filial, puso fin al sueño copero del equipo murciano, que en la vuelta de los dieciseisavos de final no pudo frenar el vendaval de su rival tras la reanudación, cuando los locales anotaron cuatro de los cinco tantos del choque.
Lejos de relajarse, los jugadores azulgranas se tomaron en serio el encuentro, por lo menos en los primeros 30 minutos, cuando encerraron al Murcia en su área.
¡¡Golazo de José Arnaiz!!
El jugador del Barcelona B quiere ser parte del primer equipo y lo sigue demostrando. ¡Un crack! pic.twitter.com/V4N8fxGPdP— Samuel Gutiérrez (@samurvcf) 29 de noviembre de 2017
Ante el cerrojo rival, Valverde apostó por la posesión y en abrir las bandas explotando el desequilibrio de Deulofeu, en la izquierda, y la velocidad de Semedo y Aleix Vidal, en la derecha.
Un monólogo que no se traducía en ocasiones manifiestas de gol, pero sí en llegadas peligrosas que los centrales del Murcia lograron solucionar de manera solvente hasta el minuto 16, cuando en un rechace de Orfila a un disparo de Aleix Vidal el balón fue a parar a la cabeza de Alcácer, que empujó el esférico a la red sin oposición.
Tras una primera media hora con un juego notable que no se tradujo en ocasiones claras, el Barcelona desaceleró el motor y el Murcia pudo gozar de posesiones más largas, aunque apenas generaba peligro en la portería de Jasper Cillessen, que fue un espectador más del partido.
El Barcelona salió del vestidor menos contemplativo en ataque.
Aleix Vidal se inventó una jugada por la derecha y su asistencia encontró a Gerard Piqué, que solo tuvo que empujar el balón en la última excursión en ataque antes de que Valverde le sustituyera (min.57).
Tras el tanto de Piqué, el Murcia se desordenó en defensa y el Barcelona lo aprovechó para hurgar en la herida rival. En éstas, no tardó en llegar el tercer tanto azulgrana en una jugada colectiva al primer toque iniciada por Alcácer, y seguida por Semedo que, con una sutil asistencia, encontró la cabeza de Aleix Vidal. El extremo superó a Santomé con una vistosa parábola (min.60).
El festival azulgrana no cesó, a pesar de los cambios. Valverde dio entrada a los jugadores del Barça B Jose Arnaiz y David Costas. También reapareció Sergi Roberto, después de superar una lesión muscular.
De hecho, el centrocampista de Reus fue uno de los protagonistas del cuarto tanto con una asistencia en profundidad a Denis Suárez, que superó la meta visitante tras un buen control en el interior del área (min.74).
Con información de Excélsior