Hasta para ver películas de terror hay una edad adecuada. Un factor importante a considerar antes de que tu pequeño tenga su primer encuentro con las casas embrujadas y los gritos, es que se encuentre en la edad en la que sabe diferenciar entre la realidad y la ficción.
Lo que nos permite disfrutar una buena película de miedo es que sabemos que lo que vemos en la pantalla es sólo una película, algo que no va a dañarnos.
De acuerdo con un estudio de la Universidad de Texas, los niños aprenden esta distinción entre los tres y seis años. Ésto no quiere decir que desde el preescolar ya los puedes llevar contigo a ver El Conjuro, sino que en esa etapa comprenderán mejor que una película no representa un riesgo real. Es la preparación inicial antes de ver cualquier filme de cualquier género.
Es importante considerar la personalidad individual de cada niño antes de permitirle ver filmes de horror. Aunque la inteligencia de los infantes tenga etapas determinadas, no es secreto para nadie que existimos personas más nerviosas que otras. La historia que a un niño de 8 años no lo hace ni sudar, a otro de 10 podría darle pesadillas.
Los especialistas recomiendan considerar estos factores para escoger una película de terror apropiada para ver con nuestros hijos:
1. Amistad. Los personajes de la historia deben demostrar que la amistad es importante para resolver un problema. Tener a alguien cerca nos da seguridad.
2. Nada o casi nada de sangre y tripas. Cuando apenas aprende sobre su propio cuerpo, ver la figura desmembrada de alguien más podría ser demasiado perturbador.
3. Temas supernaturales. A los 11 años las personas nos empezamos a dar cuenta de lo peligroso que es el mundo real.
Por ello se recomienda que a esa edad sólo nos asusten situaciones supernaturales en la pantalla, como fantasmas o vampiros. No asaltos, ni asesinatos.
4. Un final redentor. Lo mejor es elegir una película que tenga un final claro, en el cual los protagonistas se salven.