Charlize Theron regresa mañana a las pantallas de cine de México hecha toda una bomba… ¡pero una bomba atómica! En Atómica, la ganadora del Óscar por Monster sorprende como una sensual heroína que, en tiempos de la Guerra Fría, es capaz de cometer las más grandes atrocidades por evitar una catástrofe mundial.
En esta aventura llena de espectaculares secuencias de acción, matizadas con un rítmico soundtrack y una fotografía colorida, el cineasta David Leitch también prueba a James McAvoy como un divertido hombre de acción.
Lorraine Broughton (Theron) y David Percival (McAvoy) tendrán que unir fuerzas, como agentes secretos, en una intriga de espionaje cargada de adrenalina y numerosos peligros.
"Lo que más me atrajo de esta película es su sensualidad y su descarado objetivo de entretener. Es tan genial como quieras", cuenta McAvoy.
"Cuando el director me ofreció el guión, envió una guía visual donde mostró sus ideas conceptuales para la película, y fueron las cosas más sexis y divertidas que he visto".
A diferencia del personaje de Charlize, que combina sensualidad con agresividad, el del británico es un hombre venido a menos en todos los sentidos.
"Mi personaje está plagado de abuso de drogas, de alcohol y, probablemente, tiene enfermedades de transmisión sexual. Él tiene un amor por el juego que es el espionaje, pero al mismo tiempo lo odia", agrega.
Al actor se le ve lo mismo en una orgía con chicas, que peleando con criminales fuera de serie. Aunque en eso del combate, elogia el trabajo de su coestrella. "Nuestro director es un ex stuntman, así que sabe coreografiar. Yo me aprendí mis movimientos con cierta credibilidad, pero quien sin duda apantalló a todos fue Charlize. Es fuera de serie en esto".
(Con información de Agencia Reforma).