La derrota en tiempos extra contra Portugal caló hondo en Juan Carlos Osorio, pero también las burlas del árbitro asistente Abdulah Alshalwai en algunas jugadas del partido, sobre todo en el penal no marcado a Héctor Moreno al final de las acciones, que desde su perspectiva era "clarísimo" y no se recurrió al VAR.
El estratega colombiano perdió nuevamente la serenidad y al final no pudo contenerse y encaró al 'abanderado' árabe enérgicamente. Su enojo y frustración quedaron en evidencia y Javier Hernández, que ya había sido relevado, también se unió a los reclamos en el banquillo sobre el integrante del cuerpo arbitral.
"El árbitro asistente se burlaba. Eso fue lo que lo hizo salir de sus casillas al Profe (Osorio) y por eso explotó. Fue antes de acabar, en el penal y otras jugadas. Se reía de nosotros", confirmó un miembro de la banca mexicana.
En el conjunto tricolor son conscientes de los errores que se cometieron para dejar escapar el tercer lugar del torneo. Sin embargo, también se cree que la jerarquía de Portugal tuvo peso en algunas decisiones de los hombres de negro como fue la jugada del supuesto penal que se exigía sobre Moreno en el segundo tiempo extra.
"Lástima, era penal. Pero es el campeón de Europa y eso pesa", lamentan en el seno de la escuadra nacional.
Muestra su frustración
Juan Carlos Osorio volvió a mostrar una gran calentura. Insatisfecho con la cuarteta arbitral durante gran parte del juego contra Portugal, el entrenador vio desde el vestidor los últimos instantes porque no fue revisada la jugada del minuto 118, cuando Héctor Moreno pareció sufrir un empujón que habría ameritado penal.
La banca mexicana explotó en reclamos para pedir al menos la revisión de la jugada por parte del VAR, pero fue el estratega quien tuvo que ser contenido por Alfredo Talavera para que sus exigencias contra el asistente no pasaran a mayores. Desde antes, el colombiano le había aplaudido al hombre de la bandera como pidiéndole que se pusiera a trabajar.
Un par de decisiones que no le gustaron lo empezaron a encender. “¡Please, please!”, le reclamaba el cuarto oficial al timonel para que le bajara a su enojo todavía durante el tiempo regular. Sin embargo, el partido terminó con él en el vestuario pero al menos con jugadores agradecidos porque el Tri volvió a ser un consentido de los rusos.
'Todos vieron falta en la pantalla, menos el árbitro'
El clímax emocional en el Spartak Stadium no se dio durante la atajada del penal de Guillermo Ochoa y ni siquiera cuando cayó el autogol que puso a México arriba en el marcador.
La afición rusa que hizo del Tri su consentido de la competencia porque en cada uno de sus partidos lo apoyó, salvó cuando enfrentó al anfitrión, rugió cuando al minuto 118 pasaron la repetición de la jugada en que Héctor Moreno pedía penal.
El capitán de la Selección Nacional, Rafael Márquez, lamentó que haya árbitros sin tanto nombre, como Fahad Al Mirdasi, de Arabia Saudita, al que dijo nunca haber visto ni saber de qué país era, aun cuando fue quien pitó el México vs. Rusia.
