Kim Kardashian, de 34 años, fue captada en abril pasado por los paparazzi durante unas vacaciones en México.
Dichas imágenes dieron la vuelta al mundo ya que dejaron al descubierto las imperfecciones en el voluptuoso cuerpo de la celebridad, quien se esfuerza por ocultarlas.
Unos meses después, Kardashian habló finalmente sobre sus fotos con celulitis.
En una entrevista para TV, aseguró que las imágenes fueron retocadas para empeorar su figura.
En The View, la también modelo y empresaria admitió que no se encontraba en su mejor forma cuando se tomaron las fotografías, pero que las imágenes en las que aparece con un diminuto bikini negro en realidad fueron editadas para perjudicarla.
"Vi estas horribles fotos mías cuando estaba de viaje en México y la gente las estaba retocando", dijo.
"Definitivamente no estaba en mi mejor forma. No había hecho ejercicio en 12 semanas", reconoció.
"No me sentía yo misma", siguió comentando con respecto a las fotos. "Y cuando la gente se puso a retocarlas para que se viesen peor de lo que eran y luego empezaron a circular, me quedé como 'OK, voy a ponerlo todo en su sitio' y empecé a entrenarme", explicó.
Las imágenes al natural de la celebridad decepcionaron a sus millones de fans de las redes sociales, que le expresaron su indignación por mentir durante años con su apariencia, perdiendo al menos cien mil seguidores por esas fotos.