Este día en las instalaciones de Coapa en la Ciudad de México habrá festejo especial, ya que el delantero tabasqueño, Diego Lainez Leyva, está llegando a los 17 años de vida, celebrando entre los amigos y compañeros de su equipo las Águilas del América.
El también considerado 'La Joya del América', llega a los 17 años con varios sueños cumplidos desde su infancia, pues como es sabido, desde que tiene uso de razón ha sido seguidor del equipo al que hoy defiende en la cancha, además de que ha dejado huella futbolística desde su paso en fuerzas básicas y en la Selección.
Y es que desde pequeño, cuando militaba en Panteras de CEM Anáhuac en la Liga Infantil 'Francisco Rosas Ángel' de Villahermosa, Diego siempre dijo que quería ser futbolista, y que no iba a dejar de cumplir su sueño de jugar en Primera División.
A los 10 años, ya con talento demostrado en la cancha, logró su primer título con la Selección de Tabasco en el Nacional de la categoría, y de ahí se vinieron varios trofeos más para su equipo local, y para la entidad.
Antes de dejar su tierra natal, Panteras de CEM Anáhuac, representando a Tabasco en un Nacional categoría sub13 lograron el título nacional, con lo que se coronaron monarcas, siendo la despedida digna para Diego de su tierra natal.
Visoreado desde pequeño, Diego fue cobijado por Pachuca, equipo en donde ya militaba su hermano Mauro y con el que viajó a Corea para su primer compromiso internacional y en donde siguió llamando la atención por su talento.
A su regreso, recibió la oportunidad de América, su sueño estaba por cumplirse, sin embargo, su corta edad y sus estudios pusieron en duda a sus papás de dejarlo ir, a lo que el 340 del equipo más popular del México, señaló, “Si yo me quedó, seré el niño más infeliz del mundo”, frase que conmovió a sus padres quienes a ver la decisión del pequeño, optaron por brindar el permiso para que se uniera a las fuerzas básicas y así comenzar a escribir la historia que hoy todo el país conoce.
Campeón con América, llegó también a vestir la camiseta de la Selección Nacional desde la Sub-15, en donde ganó diversos trofeos y reconocimientos de forma individual, el más reciente en Chile, en el torneo de la Universidad Católica.
Regalo adelantado
Sin duda este 2017, su mejor momento fue el 27 de febrero, cuando recibió el llamado para viajar a Torreón con el Primer equipo, y el 1 de marzo, saltar a la cancha ante los Santos, y dejar huella con buenas jugadas, comenzando a escribir su historia.
Ni que decir de ese 4 de marzo de 2017, fecha en la que debutó en la Liga en León, extrañamente, lugar en el que jugará su hermano mayor y 15 días después, el destino le tendría preparada otra sorpresa, ya que sería titular ante los Pumas, enfrentando a un tabasqueño en el máximo circuito.
HOY que sople sus 17 velitas, Diego seguramente tendrá muchos motivos para agradecerle a Dios, pero también, otros sueños que poner en la balanza, en la mente, otros objetivos que cumplir, una nueva etapa que vivir y disfrutar… ¡Feliz cumpleaños Diego!.
